MICROPIGMENTACIÓN CAPILAR
La pérdida de cabello puede tener un fuerte impacto en la autoestima, tanto en hombres como en mujeres. Más allá de la estética, influye en cómo nos vemos y en la confianza con la que nos mostramos al mundo. La micropigmentación capilar es una solución eficaz, segura y no invasiva que permite recrear visualmente la sensación de cabello en zonas donde se ha perdido densidad o ya no crece.
Mediante la implantación de pigmentos específicos en el cuero cabelludo, se consigue un efecto de folículo capilar realista, logrando resultados naturales que rejuvenecen el aspecto y mejoran la seguridad personal.
Cada caso se valora de manera individual para garantizar que la micropigmentación sea la opción adecuada y que el resultado final cumpla las expectativas de naturalidad.
El procedimiento se realiza en varias sesiones progresivas, normalmente tres, separadas entre 15 y 30 días. En cada una se trabajan capas de punteados sutiles, aumentando poco a poco la densidad y profundidad del color hasta alcanzar el efecto deseado.
La duración de cada sesión depende de la extensión a tratar, pero los resultados son duraderos y muy satisfactorios.
La micropigmentación capilar no solo transforma la imagen: devuelve seguridad, equilibrio y una nueva manera de sentirse bien frente al espejo.
Técnicas de micropigmentación capilar
Densificación capilar
Perfecta para fases iniciales de pérdida de cabello en hombres y mujeres. Aporta sensación de mayor volumen y densidad.
Efecto rapado
Se realiza mediante micropuntos que imitan el nacimiento del cabello en el cuero cabelludo, logrando un efecto de pelo rasurado totalmente natural. Especialmente recomendado para alopecias avanzadas.
Cobertura de cicatrices
Mediante técnicas de camuflaje se recrean pelos, lo más similares a los naturales, en cicatrices postquirúrgicas o accidentes en la cabeza para que las zonas que han perdido los folículos no se aprecien, logrando un resultado estético natural.
